Título: Entre lo dulce y lo amargo
Autora: Pilar Cabero
Editorial y año: Vergara, 2012
Se han amado desde niños, incluso imaginaron una vida juntos. Pero
cuando el maestro confitero Samuel Boudreaux regresa a San Sebastián
para casarse, después de seis años de ausencia, no es con María Aguirre
con quien está prometido: ella ya está casada. Poco después de que él se
marchara a Venezuela para perfeccionarse en el arte del chocolate, María
contrajo matrimonio. Ahora trabaja junto a su marido en una confitería de la ciudad, y la
llegada de su antiguo amor la llena de desasosiego. Samuel no le ha
perdonado que lo traicionase con su maestro y mentor. Sin embargo, las
circunstancias le obligarán a dejar su odio de lado...
Antes de abrir mi propio blog de reseñas, ya entré en contacto con la novela romántica gracias a un foro, de cuya sección romántica fui el moderador varios años. A raíz de ello, comencé a ver cómo un interesante número de autoras españolas intentaban derribar el monopolio de las extranjeras en un género difícil para nuestras paisanas. Poco a poco son más las escritoras de nuestro país que logran publicar historias excelentes y que se merecen el lugar que con tanto esfuerzo han conquistado. Pilar Cabero es una de ellas y, tras leer Entre lo dulce y lo amargo, no dudo en afirmar que estamos ante una de las mejores exponentes de su generación.
Samuel y María se han querido siempre, incluso de niños. Él entra a trabajar como aprendiz de maestro confitero y, tiempo después, su ambición lo lleva a querer viajar a Venezuela para mejorar en el arte del chocolate. Al partir, Samuel y María prometen esperarse y quererse aun en la distancia. Al cabo de unos meses, ya en el exótico país, Samuel recibe una carta que le informa de que María se ha casado con Sebastián, el que fuera su maestro. El amor que ambos creían enterrado vuelve a surgir con el retorno de Samuel a España, aunque llegue de la mano de la joven que se convertirá en su futura esposa. El reencuentro entre Samuel y María será más tenso de lo esperado.
Entre lo dulce y lo amargo es la personificación de la elegancia. Ya desde la bella portada y el atractivo título la novela capta la atención del lector, aunque es en las páginas del libro de Pilar Cabero donde encontraremos una historia inolvidable y maravillosa. Esta vez, la autora nos sorprende con una trama que se aleja del típico argumento romántico, ya que los dos enamorados ya se aman al principio de la obra y el matrimonio de ella se interpone en su camino. Los obstáculos de la vida no han mermado el amor que sienten el uno por el otro, aunque deban ser conscientes de la realidad que los rodea. Esa verosimilitud, la naturalidad con que evoluciona la relación, es encomiable, ya que nos hallamos ante un género que a veces tiende a la idealización de las acciones y los personajes.
No solo la trama hace gala de una objetividad manifiesta, sino que el perfil de los protagonistas se alza como el aspecto de mayor interés. Me parece digno de mención el hecho de que no solo la pareja de Samuel y María se nos antojen cercanos, sino que en la novela se palpa un gran trabajo también con los secundarios, algunos de los cuales bien merecen su propia historia. La elegancia que he comentado antes se observa también en el estilo de la autora. Impecable, despojada de florituras innecesarias y con una riqueza léxica incomparable, la narración se convierte en un paseo lleno de gracia que se opone perfectamente a la fuerza pasional que sienten los personajes principales. Un equilibrio bien construido que no hace sino acrecentar la empatía que nos une a la pareja.
Por último, la ambientación histórica en San Sebastián, un enclave original y poco explotado aún en literatura romántica, es espléndida y me ha permitido viajar en el tiempo y recorrer las calles de una ciudad que todavía no he visitado. Entre lo dulce y lo amargo es la novela que confirma a Pilar Cabero como una escritora de futuro prometedor. Además, he tenido el placer de cruzar algunos mensajes con ella y muchos autores deberían aprender de la humildad y la amabilidad con que responde. Me alegra haber dado una oportunidad a su último libro y poder recomendarlo abiertamente desde aquí. Los amantes de la novela romántica que aún no hayáis leído a Pilar tenéis una asignatura pendiente.