Título: Adulterio
Autor: Paulo Coelho
Traductora: Ana Belén Costas
Editorial y año: Planeta, 2014
Linda está casada con un hombre rico, tiene dos hijos y vive en una hermosa casa en Ginebra. Trabaja en el periódico más importante del país, es guapa y tiene todo lo que se pueda desear. A ojos de todos, su vida es perfecta. Sin embargo, no es feliz; una gran insatisfacción la corroe y se siente culpable por no ser capaz de disfrutar de lo que tiene. Un día, debe entrevistar a Jacob König, un antiguo novio que ahora es un político de cierta relevancia. Este encuentro es suficiente para que ella se sienta capaz de dar rienda suelta a sus fantasías.
Han debido transcurrir casi tres años para que en el blog aparezca la reseña de uno de mis escritores favoritos. Paulo Coelho es un autor que no pasa desapercibido y que levanta tanto pasiones como odios. A mí sus novelas me suelen gustar mucho, si bien tengo que confesar que huyo de sus libros más metafísicos y religiosos. En Adulterio vuelvo a encontrar una trama de las que me convencen: una historia peculiar que invita a reflexionar a través de un mensaje precioso. El escritor brasileño retoma la fórmula que hizo de El alquimista o El zahir dos de mis novelas preferidas de todos los tiempos.
La vida de Linda parece perfecta: tiene un trabajo interesante, un marido perfecto, unos hijos maravillosos y vive en la preciosa ciudad de Ginebra. En lo más hondo de su alma, sin embargo, empieza a crecer un agujero oscuro e insondable del que surgen la apatía y la desolación que comienza a sentir. Cuando ya creía que jamás iba a salir de esa situación, se reencuentra con un antiguo novio del instituto, quien despierta en Linda unos sentimientos que ella creía olvidados. El dilema está sobre la mesa: ¿merece la pena echar por la borda una vida cómoda por una mera aventura o será su infidelidad la que la ayudará a dar sentido a su existencia?
Adulterio es una apuesta muy valiente. Paulo Coelho elige un tema espinoso y difícil de enfocar sin emitir juicios de valores y lo consigue con una naturalidad pasmosa. El lector pasa a sentir distintas emociones para con la protagonista: de la rabia inicial al presenciar un comportamiento absurdo a la compasión y empatía absolutas cuando se da cuenta de las razones que mueven a Linda a actuar de ese modo. El autor ha logrado plasmar la esencia inestable del ser humano, por lo cual cualquiera es capaz de hallar en la novela algún pensamiento que le dará que pensar en su propia vida. Aprovecho la reseña para criticar la actitud de quienes se mofan de Coelho: si un escritor nos regala reflexiones interesantes, es un gran autor; si se apellida Coelho, sin embargo, es autoayuda. No: las novelas de Coelho no son autoayuda, sino fábulas para adultos.
En el libro, por otro lado, pasean numerosas descripciones, precisas y vívidas, de la ciudad de Ginebra, de modo que al leerlas uno se forma una imagen mental muy completa del lugar donde viven los personajes. Estos, por otra parte, se ven eclipsados por la fuerza que irradia la protagonista, aunque no por ello desempeñan un papel menos importante en la obra. El marido y el amante, sobre todo, son los dos pilares de la trama y se nos antojan cercanos y muy humanos. Por último, el estilo del autor, que muchos consideran plano y simple, hace gala de lo que para mí es un ritmo ágil y constante, gracias al cual nos enfrentamos a una novela que se lee prácticamente sola.
Adulterio es un canto al amor y a la familia muy atípico, pero interesantísimo. Hacía mucho tiempo que esperaba un libro de Paulo Coelho que recuperara la magia y la huella que tan bien definen las obras de ficción del escritor brasileño, y por fin se ha decidido a abandonar ese yo que menos me atrae y a recuperar la mente imaginativa que tan buenos resultados dio en su momento con historias como Veronika decide morir u Once minutos. Nunca dejará de sorprenderme la disposición de muchas personas a menospreciar a este autor sin haber leído nada de él. Con la reseña de hoy quiero romper una lanza a favor de las historias de Coelho y alzar mi voz para aplaudir a un escritor que ha sabido tocarme la fibra en distintos libros. Ahora, con su última apuesta, me ha emocionado y sorprendido una vez más.
La vida de Linda parece perfecta: tiene un trabajo interesante, un marido perfecto, unos hijos maravillosos y vive en la preciosa ciudad de Ginebra. En lo más hondo de su alma, sin embargo, empieza a crecer un agujero oscuro e insondable del que surgen la apatía y la desolación que comienza a sentir. Cuando ya creía que jamás iba a salir de esa situación, se reencuentra con un antiguo novio del instituto, quien despierta en Linda unos sentimientos que ella creía olvidados. El dilema está sobre la mesa: ¿merece la pena echar por la borda una vida cómoda por una mera aventura o será su infidelidad la que la ayudará a dar sentido a su existencia?
Adulterio es una apuesta muy valiente. Paulo Coelho elige un tema espinoso y difícil de enfocar sin emitir juicios de valores y lo consigue con una naturalidad pasmosa. El lector pasa a sentir distintas emociones para con la protagonista: de la rabia inicial al presenciar un comportamiento absurdo a la compasión y empatía absolutas cuando se da cuenta de las razones que mueven a Linda a actuar de ese modo. El autor ha logrado plasmar la esencia inestable del ser humano, por lo cual cualquiera es capaz de hallar en la novela algún pensamiento que le dará que pensar en su propia vida. Aprovecho la reseña para criticar la actitud de quienes se mofan de Coelho: si un escritor nos regala reflexiones interesantes, es un gran autor; si se apellida Coelho, sin embargo, es autoayuda. No: las novelas de Coelho no son autoayuda, sino fábulas para adultos.
En el libro, por otro lado, pasean numerosas descripciones, precisas y vívidas, de la ciudad de Ginebra, de modo que al leerlas uno se forma una imagen mental muy completa del lugar donde viven los personajes. Estos, por otra parte, se ven eclipsados por la fuerza que irradia la protagonista, aunque no por ello desempeñan un papel menos importante en la obra. El marido y el amante, sobre todo, son los dos pilares de la trama y se nos antojan cercanos y muy humanos. Por último, el estilo del autor, que muchos consideran plano y simple, hace gala de lo que para mí es un ritmo ágil y constante, gracias al cual nos enfrentamos a una novela que se lee prácticamente sola.
Adulterio es un canto al amor y a la familia muy atípico, pero interesantísimo. Hacía mucho tiempo que esperaba un libro de Paulo Coelho que recuperara la magia y la huella que tan bien definen las obras de ficción del escritor brasileño, y por fin se ha decidido a abandonar ese yo que menos me atrae y a recuperar la mente imaginativa que tan buenos resultados dio en su momento con historias como Veronika decide morir u Once minutos. Nunca dejará de sorprenderme la disposición de muchas personas a menospreciar a este autor sin haber leído nada de él. Con la reseña de hoy quiero romper una lanza a favor de las historias de Coelho y alzar mi voz para aplaudir a un escritor que ha sabido tocarme la fibra en distintos libros. Ahora, con su última apuesta, me ha emocionado y sorprendido una vez más.